Un buen profesional nunca deja de aprender para estar al día de las novedades y avances de su sector, pero es cierto que en determinadas profesiones es una obligación para mantenerse activo en el mercado. Este es el caso del sector de la belleza y la estética, y conocer los tratamientos más punteros es interesante tanto para los propietarios de los centros de estética como para las personas que trabajan en este gremio. A continuación, os damos algunas ideas de formación para esteticistas.
Formación en maderoterapia, drenaje linfático y masaje anticelulítico
La acumulación de grasa en ciertas partes del cuerpo es común en mujeres y hombres, aunque se concentra en diferentes zonas en función del sexo. Para muchas personas resulta antiestético y buscan tratamientos para deshacerse de la celulitis, y es que además no es algo que esté estrictamente relacionado con el peso: es habitual que mujeres muy delgadas presenten celulitis en los muslos y en el abdomen. Una sugerencia de formación para esteticistas es aprender maderoterapia, una técnica que está enfocada a tonificar y moldear el cuerpo mediante el empleo de instrumentos de madera.
La maderoterapia es un tratamiento reductor que no es invasivo y en el que se usan utensilios de madera como la copa sueca, que moldea; o el rodillo liso, que estimula el sistema circulatorio y linfático. Es posible que la persona que se someta a esta técnica sienta una ligera molestia porque el profesional tiene que ejercer cierta presión para que el tratamiento sea efectivo, aunque es totalmente soportable.
En cuanto a formación para esteticistas también es interesante dominar el drenaje linfático, que es una técnica que consiste en aplicar masajes suaves para favorecer la circulación de la linfa y el sistema linfático. Con el drenaje linfático se persigue eliminar edemas, que se forman cuando el sistema linfático tiene dificultades para depurar algunas zonas y, como consecuencia, los líquidos y las sustancias se estancan. El drenaje linfático manual tiene que ser indoloro y los movimientos que realice el profesional deben seguir la dirección de los conductos linfáticos.
Por su parte, el masaje anticelulítico está concebido para fragmentar las moléculas celulíticas, activar el sistema linfático y romper la grasa. Conviene recordar que las maniobras que se empleen no deben resultar dolorosas para quien se someta al tratamiento.
Formación en microblading
En el proceso de formación para esteticistas puede ser estratégico aprender microblading, que es una técnica de maquillaje semipermanente que se aplica para dar forma a las cejas y rellenar las calvas. Mediante agujas finitas se deposita el pigmento pelo a pelo, y es posible diseñar las cejas hasta el punto de oscurecer su color si así se desea. El microblading se diferencia de la micropigmentación en su duración: sus efectos pueden llegar a durar un año, pero no más. Como consecuencia el resultado es más natural que los que ofrece la micropigmentación, y también es menos doloroso.
Puesto que hemos aludido a la micropigmentación, vamos a aportar algún dato más sobre esta técnica. Como acabamos de comentar, se trata de una técnica de maquillaje permanente que puede ser útil en cuanto a la formación de esteticistas. No solo se centra en maquillar, sino que se pueden corregir facciones o potenciar ciertos rasgos. Por ejemplo, con la micropigmentación de labios se puede aumentar la sensación de grosor de los mismos, y con la de ojos se puede minimizar el efecto de ojos caídos. La micropigmentación dura años, aunque permite remodelaciones si la persona cambia de gustos.
Formación en todo tipo de manicuras: semipermanente, uñas acrílicas y de gel
Basta con mirar alrededor para cerciorarse del negocio en el que se han convertido los establecimientos especializados en manicura. ¿El motivo? No tenemos tiempo, o no lo queremos emplear para pintarnos las uñas, y queremos que los resultados sean duraderos.
Mientras que las uñas acrílicas y de gel se construyen con moldes, después se adhieren a la uña y se trabajan por encima con el acrílico o el gel, en la manicura semipermanente se aplica el esmalte directamente sobre la uña. Las uñas acrílicas, que se secan al aire y se retiran con acetona o torno, son más resistentes que las de gel, que se secan con lámpara. Por lo que respecta al esmalte de la manicura semipermanente, se seca con luz UV o LED, y suele durar unos 14 días.
En este post hemos reunido tan solo unas pocas propuestas de formación para esteticistas, pero existen otras posibilidades. Te invitamos a que eches un vistazo a nuestros cursos de la Escuela de Belleza y a que te pongas en contacto con nosotros si necesitas asesoramiento.